imagen Show para pocos…mientras algunos cantan otros mueren de hambre

Con tribunas del mítico estadio Luna Park repletas de funcionarios del gobierno, diputados, dirigentes y militantes libertarios llegados desde CABA y el conurbano, un Milei desatado, cantó hits de La Renga y habló por más de 1 hora con mensajes anticasta y antisocialismo.

Javier Milei en el Luna Park, cantó, habló y apuntó contra el kirchnerismo y los que «quieren voltear al gobierno». Foto: Presidencia.

El presidente Javier Milei cumplió finalmente, su sueño de cantar como un líder rockero en el Luna Park, escenario de estrellas del espectáculo y del deporte, en lo que fue una mezcla de recital y acto político con un discurso técnico y economista de más de una hora, y un conversatorio final con su vocero Manuel Adorni, y el diputado José Luis Espert.

Todo en el mismo show que empezó a las 21,15 y culminó 2 horas después en medio de una lluvia de papelitos de colores, después de largas críticas a la casta, al socialismo internacional, y elogios a cada uno de sus ministros del gabinete, empezando por su hermana, Karina Milei, organizadora del evento.

Desde temprano habían empezado a llegar en distintos medios públicos, caminando o en sus propios medios militantes libertarios con banderas, panfletos, caretas de Milei y el típico merchandising libertario que rodearon las vallas alrededor del Luna Park, en medio de un fuerte operativo de Seguridad comandado por la Casa militar y la policía Federal.

Con entradas agotadas y a estadio lleno, hubo desfile del Gabinete, de personalidades y militancia que acompañaron con cánticos picantes contra Cristina Kirchner y el presidente de España, Pedro Sánchez.

Sus padres, la ex vedette de los ’90 Yuyito González se vieron sentados junto a ministros y diputados, y a la vicepresidenta Victoria Villarruel, que coparon la primera fila frente al escenario en un corralito con sillas armado para los 300 invitados especiales. Por allí se vieron posar a los ministros de Economía, Luis Caputo con la ministra Sandra Pettovello y la diputada Lilia Lemoine, o a los ministros Patricia Bullrich, Gustavo Petri y Guillermo Francos.

Otro que llegó temprano fue Daniel Scioli, quien se llevó una ovación desde la tribuna repitieron su ya famosa frase: «Denle a Milei el premio Nobel de Economía».

Desde las tribunas, en lo alto, aportaban color personajes disfrazados con caretas de Milei, de Donald Trump y de un león, pero no se distinguieron carteles de dirigentes partidarios. Todo estaba armado para que el único líder y la atención estuviera puesta en Milei.

Milei llego a las 19 al Luna Park, en medio de un fuerte operativo policial a bordo de una camioneta blindada y motos de la PFA y se quedó en la previa con varios ministros en el camarín, mientras en las tribunas sonaban temas de sus bandas preferidas como los Rolling Stones, de La Renga, AD/DC, La Berisso, Survivor, Village People, Kiss, cánticos esporádicos de las tribunas que llaman a «votá Milei», como un remake de la campaña para el balotaje.

Entre los que adhirieron entre el público se pudo ver a un grupo de diputados del Pro, encabezados por Cristián Ritondo, y otros dirigentes bullrihcistas.

También fueron parte de la fiesta los fieles colaboradores de las redes sociales de Milei, entre ellos, Agustín Romo y Iñaki Gutiérrez.

Milei entró como un rockstar caminando entre el público del campo al ritmo de su tema preferido: Panic Show, y se subió al escenario cantando, mientras respondió cada uno de los gritos que le llegaban desde el público, asintiendo críticas al kirchnerismo, y al presidente de España.

En su intento de instalarse como un líder carismático, mezcló frente a un público variopinto, mezclado de diferentes clases sociales e intelectuales, conceptos y debates filosóficos y teóricos como la «mano invisible» del «mercado», el «teorema de Paretto», o «el dilema del prisionero», hasta explicó su postura en contra del aborto en una crítica a lo que denominó «un invento del Club de Roma para controlar la población» hasta comparaciones de una lectura de un texto matemático con una revista playboy, logrando la ovación de los seguidores, al grito de «libertad, libertad».

Saludó especialmente a sus padres, a su hermana, a la ministra Sandra Pettovello, al diputado Martín Menem y a su vocero Manuel Adorni y al diputado José Luis Espert, que lo acompañaron en el living, hasta el final.

Dejó frases como «si no nos metemos en el barro los zurdos nos llevan puestos», y un llamado a «dar la batalla cultural en todos lados», justificando su confrontación con el presidente -español, o su discurso de Davos, criticando a los líderes de la ONU en general.

Deja un comentario